Lluvia… taxi… remis… teléfono “eternamente” ocupado…
Innumerables los usuarios del servicio que no son atendidos durante los días de lluvia. Posturas encontradas de ambas partes: las empresas sostienen que «la gente no quiere mojar su auto cuando llueve», sin embargo los usuarios afirman que en su mayoría no tienen otro medio de movilidad que no sea el remis, y que «ni siquiera llamando con una hora de anticipación logran establecer contacto para solicitar un móvil que los haga llegar puntual al trabajo, o a horario los niños a clases».
Un problema que data de viejas épocas, desde que surgió la primer empresa de remises en Casilda, allí ya se daba esta situación. Sin embargo, el Honorable Concejo Municipal de Casilda, lleva más de 20 años sin poder establecer una ordenanza que garantice la continuidad en la prestación del servicio. 20 años… un tiempo considerable como para haber podido encontrar una solución, si se hubiera querido, aunque todos sabemos que los tiempos de los políticos son diferentes a los de un vecino común y corriente.
Y más allá de la lluvia en sí, cada vez es mayor la cantidad de agua sobre las calles, que llega de cordón a cordón y que hace imposible cruzarlas a pie sin mojarse hasta los tobillos, por eso también crece la demanda de remises, porque más allá que tal vez la gente deba desplazarse unas pocas cuadras hasta llegar al trabajo o la escuela, solo 100 metros son suficientes para no poder hacerlo a pie.
El entubamiento de un canal de desagüe principal a lo largo de Bv. Lisandro de la Torre, o la misma calle Bs. As. es una obra inmensa en cuanto a costo y desarrollo, aunque de haber ahorrado desde los años que políticamente la vienen prometiendo… ya estaría hecha tres veces…
Contanos, ¿conseguiste remis esta mañana?
¿llegaste a horario al trabajo? ¿pudieron ir los chicos a la escuela?