El agua gana terreno en un pueblo sin planificación…
Desde hace ya algunos años la localidad de Chabás, al igual que Sanford y Casilda se convirtieron en puntos de serios problemas para la población durante períodos de temporales intensos. Si bien por una parte es cierto que el caudal de lluvia se acrecentó últimamente, y que suelen ocurrir grandes acumulados de agua en cortos períodos de tiempo, tampoco es algo nuevo, ya viene sucediendo desde algunos años atrás, y todos los funcionarios que han pasado en las distintas esferas han argumentado lo mismo frente al problema de la inundación, sin materializar ninguna solución concreta.
Los mandatos pasan, ellos creen que la gente se olvida, el dinero de obras se esfuma de la nación, de la provincia y también de municipios y comunas. Mientras los gobernantes creen que la gente se olvidó del problema, se desata una tormenta y el pueblo comienza a convertirse en una ciudad fantasma. La energía se corta por las ráfagas de viento que azotan las precarias líneas de media tensión, el caudal de agua potable merma hasta sólo gotear por la falta de electricidad en los pozos de extracción en zona rural, la boleta tanto de agua y de energía prometen grandes aumentos para este 2017 aunque sin mejoras evidentes en el servicio. Las calles se transforman en un río de gran caudal que arrasa con todo y se lleva la basura que desde hace semanas no juntan. La gente se queda dentro de sus casas, viendo como la ciudad se entristece, prenden la radio y escuchan al político que votaron “vamos a gestionar un plan integral de desagües que nos permita poder tener un correcto drenaje de la traza urbana, igualmente todos los sistemas funcionaron a la perfección, sólo nos jugó una mala pasada que estamos hablando de una importante cantidad de lluvia caída en un corto período de tiempo”… y es lo último que escuchan porque apagan la radio cansados de las mismas mentiras.
Sólo queda esperar que las lluvias cesen y el agua baje, que se restablezca la energía y salir a dar una vuelta para marcar en la hoja de ruta los nuevos baches que se abrieron por el temporal y que seguramente pasaran a formar parte del paisaje cotidiano.