El último adiós al chofer del colectivo «El Puma»

Amigos de Lisandro Manccini, junto al pueblo de Fuentes, pintaron una estrella en su memoria sobre Ruta S26 en el lugar del accidente.

Un grupo de amigos allegados a Lisandro Manccini, organizaron este domingo una pintada en su memoria tras la muerte a consecuencia del grave accidente de tránsito sufrido el pasado miércoles cuando el joven de 22 años conducía el micro de transporte de pasajeros El Puma.

Así, bajo el título de «La Última Despedida», sus amigos y el pueblo de Fuentes le realizaron la pintada de una estrella con sus colores favoritos; Lisandro era fanático de San Lorenzo y la estrella lleva el azul y rojo en su memoria sobre Ruta S26, entre Casilda y Fuentes. Además construyeron una pequeña capilla sobre la banquina el la cual colocaron partes del micro que conducía, a modo de recuerdo de esa tarde trágica. Mientras realizaban el homenaje recibieron la colaboración del Cuerpo de Bomberos de Fuentes y la Guardia Urbana para el corte de ruta durante algunos minutos que les demandaron los trabajos de pintura.

Lisandro «Lichi» Manccini, fanático de San Lorenzo, con sólo 22 años murió luego del choque que sufiera mientras conducía el micro de transporte de pasajeros que cubre Fuentes Casilda.

Y así te damos el último adiós amigo! Esto no es un hasta nunca, es un hasta pronto! Siempre en nuestro corazón Lisandro Manccini. Rezaban algunos de los textos que compartían sus amigos junto a la dura imagen de una estrella con su nombre en medio de la ruta.

Fue en medio de intenso temporal de viento y tierra desatado durante la tarde del miércoles 15 de noviembre cuando su colectivo impactó por detrás al acoplado de un camión que circulaba en su mismo sentido, camión que previamente había chocado contra otro y por eso estaba detenido sobre la ruta S26, a escasos tres kilómetros de la salida desde Fuentes a Casilda. A su vez, un automóvil Chevrolet Corsa chocó por detrás al colectivo ya accidentado. La visibilidad era completamente nula, en cuestión de minutos las ráfagas de viento que soplaron sobre la región con velocidades cercanas a los 100 km/h convirtieron las rutas en trampas mortales. La tierra no cesaba, sobre todo en las zonas donde los campos linderos a la ruta estaban preparados para ser sembrado y mostraban su tierra “pelada”, era como ingresar a un túnel sin escapatoria. Detenerse era peligroso y avanzar en esas condiciones lo hacía más peligroso aún.

También construyeron una pequeña capilla al margen de la ruta para recordarlo.

Tras el impacto, Bomberos Voluntarios de Fuentes acudieron al lugar del accidente y comenzaron con las primeras tareas del rescate de personas accidentadas, luego se sumaron Bomberos de Casilda en colaboración a su intervención. El conductor del micro, Lisandro Manccini, fue quien llevó la peor parte por las características del choque. Tras su rescate fue derivado al Hospital San Carlos de Casilda donde tuvo que ser intervenido por un equipo de cirujanos quienes le amputaron una de sus piernas, y al día siguiente la otra, aunque a las 48 horas de permanecer en terapia su cuerpo no resistió y falleció.